Se realizó una nueva edición de La noche de los Museos
El pasado sábado 22 de octubre entre las 19 a 02 horas, se llevó a cabo la 18° edición de este magnífico encuentro cultural en el que Museos, Institutos y Centros Culturales de la Ciudad de Buenos Aires abrieron sus puertas permitiendo que el público recorra instalaciones, aprecie puestas permanentes, disfrute de la Plástica, la Música, el Cine y además y como una propuesta ya instalada, tome conciencia de la naturaleza y la situación climática, el medioambiente y su sustentabilidad.
En esta oportunidad fueron más de 270 los espacios que abrieron sus puertas y a su vez, nuevos interesados y tradicionales visitantes se lanzaron a realizar los recorridos por barrio que propone la actividad.
También, se han sumado espacios en la vía pública, los que se encuentran en las inmediaciones de los sitios de interés y son paso obligado por los transeúntes, que inevitablemente y por curiosidad se detienen a apreciar otras muestras artísticas de corte dinámico.
Hay sitios tradicionales como el Museo de Arte Decorativo, el MALBA, el Sívori, el de Arte Moderno, el Bellas Artes, la Cárcova,el Fernández Blanco, el José Hernández, el Quinquela Martín, que siempre acaparan la atención; pero existen otros de reciente incorporación al evento, que fueron una gran oportunidad para ser visitados.
Tal es el caso del Instituto Nacional Sanmartiniano que, ubicado en la Plaza Grand Bourg en el barrio de Palermo, da espacio a la réplica de la casa donde entre 1834 y 1848 vivió el General San Martín cuando emigró a Europa. Delante de la bella casona pueden apreciarse los bustos que representan al General José de San Martín y a Mercedes de San Martín de Balcarce. Detrás de la casa, un retoño del pino del convento de San Carlos, en San Lorenzo, circundados por un granadero, un aviador, un marino, un soldado de infantería. Al cruzar la calle y en una estratégica rotonda inevitable de sortear, se alza el monumento “El abuelo inmortal”, que lo muestra sentado, con sus dos nietas, realizado por el escultor Ángel Ibarra García. Sin dudas, es un sitio de nuestra ciudad que por el trazado de sus espacios verdes y el estilo arquitectónico de las mansiones vecinas honra la figura del Libertador.
Desde las 19 y a pesar del descenso de las temperaturas luego de una semana de cálido clima primaveral, comenzaron a llegar los primeros visitantes. El esplendor del Salón Manuel Belgrano y la exhibición de pinturas y objetos pertenecientes al Libertador atraen por propia naturaleza la curiosidad de todos.
Allí donde se celebran conferencias y se proyectan documentales sobre San Martín, una pantalla con suave música de fondo informaba, a través de una proyección, todas las actividades que se realizarían en la jornada. La significativa propuesta del Instituto y donde se enfoca el interés de la actividad, es sin duda la visita guiada bajo la ilustrativa charla del Licenciado Carlos Larrosa.
Los primeros visitantes que participaron de la recorrida al Instituto, apreciaron objetos pertenecientes al Libertador, la Biblioteca, interpretaron las obras pictóricas y observaron el calco del Sable Corvo del General San Martín, una magnífica pieza realizada y donada por el orfebre Maestro Juan Carlos Pallarols.
Terminada la visita guiada, muchos interesados permanecieron en Salón Belgrano a la espera del inicio del concierto de “Pour la Musique”. Es que la estética de la presentación y el armado de los instrumentos que aguardaban su hora para ser ejecutados, habían crearon interés por lo que sucedería.
A las 22.15, el Prof. Hugo René Sanz, Contrabajista, se presentó a los asistentes explicando que el programa de concierto incluiría un Tributo al Compositor Francés Claude Bolling. Luego de agradecer a las autoridades del Instituto Nacional Sanmartiniano por el espacio cedido, explicó que las obras a interpretar serían la Suite para Flauta y Jazz Piano Trío y la Suite Picnic. Agregó además que el músico adoptó para sus composiciones el concepto “crossover” que en nuestro idioma puede comprenderse como “fusión” y consiste en tomar aspectos de la música académica y relacionarlos con el género Jazz.
Refirió biográficamente a que también fue compositor de más de cien bandas sonoras de música para cine y escribió otras Suites, entre ellas para guitarra, violín y trompeta como instrumentos solistas.
También se refirió a la proyección de imágenes de La Belle Epoque francesa y a pinturas del impresionismo francés que ilustrarían la interpretación de las obras.
La suite para flauta contó con la participación del Prof. Saul Martín como solista, quien digno de un dulce sonido, una expresividad y una soltura significativas, abordó la suite sin inconvenientes, entablando maravillosos diálogos con el pianista Guillermo Carro, dueño de una evidente formación académica que le permite abordar el “crossover” sin dificultad.
Tal fue el caso de la bella “Sentimentale”, donde el piano desarrolla una extensa y elocuente introducción para encontrarse y fundirse tímbricamente con una sensible melodía en la flauta mientras el contrabajo y la batería se unen para acompañar armónica y rítmicamente cada sección donde intervienen.
Para la Suite Picnic se sumó el solista Daniel Martí en guitarra, quien asumió durante toda la obra un protagonismo que otorgó limpieza y claridad en los pasajes con más compromiso técnico. Tal fue el caso de Madrigal sostenido con claros y expresivos acordes y sobre el final en “Badine”, donde se fundió en unísonos de terceras y quintas con la flauta y el piano.
Por su lado, la base armónico – rítmica entre Hugo René Sanz en Contrabajo y Leonardo Aledda, dueño de una multiplicidad de finos recursos técnicos y tímbricos en batería, gozó de una pulcritud de ensamble destacándose ambos intérpretes en el beat de “Tendre”.
La imágenes proyectadas y la atención del público que aportó un exquisito silencio, permitieron gozar de un íntimo concierto que ennobleció el marco solemne del Instituto Nacional Sanmartiniano.
Muchos asistentes permanecieron en el recinto esperando la medianoche. Minutos antes de que eso sucediera, el Presidente de la Institución Sr. Eduardo García Caffi, político y hombre de la cultura argentina con una destacada trayectoria en ámbitos académicos tanto como en la función pública, se dirigió a los presentes dando a conocer la obra de la Institución que preside, refiriéndose a la misión del Sanmartiniano como organismo cuya función, entre otras, es difundir el conocimiento de la vida, personalidad e ideario del Libertador General Don José de San Martín, en sus aspectos militares, morales y civiles.
Terminadas sus palabras, se interpretó el Himno Nacional Argentino en las voces de Liliana Vigo Lima, mezzosoprano, y Víctor Betinotti, tenor, junto a todos los presentes en el Salón Manuel Belgrano coronado por vítores de “Viva la Patria”.
Seguidamente, TRAMA AMERICANA – Orquesta de Cuerdas, bajo la dirección del Mtro. Adrián Crocce quienes junto al Prof. Guillermo Carro en Piano interpretaron también nuestro Himno, ofrecieron un repertorio académico de compositores latinoamericanos.
Su propuesta, guarda amplia relación con el concepto de búsqueda de raíces profundas, direccionándolas hacia el desarrollo de sentidos que develen y reivindiquen antiguos tejidos ocultos. A su vez brinda un espacio a jóvenes músicos en la búsqueda de una huella digital y cultural.
Se sucedieron así “Mourao” de César Guerra Peixe, compositor brasileño, Tres Danzas Colombianas de León Rengifo, colombiano, “Fina Estampa” de Chabuca Granda, peruana, “Entre el sueño y el Recuerdo” del joven compositor argentino Facundo González y para cerrar la maravillosa noche, la bella “Fuga y Misterio” de nuestro siempre amado Ástor Piazzolla.
Sin dudas, para todos los que estuvimos allí, fue un privilegio nocturno el recorrer y permanecer en un sitio tan afecto a nuestro acervo patriótico, sumado a la presencia de talentosos y generosos artistas, que con su música ofrecieron un marco brillante a una nueva edición de la Noche de los Museos.
FOTO: El Instituto Nacional Sanmartiniano participó de la Noche de los Museos.