La calefacción por energía solar permite un ahorro significativo

La actual situación de  aumentos de tarifas permite mirar cada vez con mayor interés un sistema que permite ahorrar energía, reduciendo los costos y a su vez cuidando el medio ambiente: el de los paneles solares

Según el último anuario publicado por CADER (Cámara Argentina de Energías Renovables) desde 2010, el LCOE (Levelised Cost of Energy) de la energía solar fotovoltaica ha caído un 73%, hasta llegar a los 0,10 USD/kWh para los grandes proyectos que entraron en operación en 2017, ubicados sobre todo en las regiones con mayor nivel de irradiación solar como Cuyo y NOA.

Si bien esto se refiere a un panorama más global y de proyectos a gran escala nacional, el decrecimiento de los costos se ve también reflejado en la aplicación de esta energía a nivel doméstico, ya que el uso de la energía solar “reduce en un 40 por ciento el consumo de energía que se utiliza para calefaccionar los hogares”, según nos explica Pablo Greco, Director de la compañía Hissuma Solar.

Para esto, existen actualmente sistemas denominados “tres en uno” que permiten contar con agua caliente sanitaria, calefacción en el invierno y climatización de piletas en el verano. Si bien son más costosos que los sistemas de termotanques convencionales, brindan estas tres posibilidades a un costo bastante razonable de inversión y con un recupero de aproximadamente 4 años.

“En los lugares donde no hay fluido de gas natural o asimismo considerando los aumentos en energía eléctrica que ha habido en el último tiempo, el poder utilizar un sistema tan completo se vuelve fundamental” agrega Greco

Podemos calefaccionar a su vez nuestro hogar con sistemas de piso radiante, radiadores o sistema de fan coil (aires acondicionados especiales), los cuales se van a nutrir de colectores solares con sus correspondientes tanques de acumulación en donde se almacenará ese calor acumulado y se enviará al sistema a través de intercambiadores de calor ayudados por bombas de re-circulación.

¿Cómo saber cuál es el mejor sistema para cada usuario?  Se deben tener en cuenta varios factores:

• Conocer la cantidad de metros cuadrados a calefaccionar.
• Conocer la cantidad de personas que normalmente circulan el lugar a calefaccionar.
• Conocer el lugar de la instalación: como dijimos antes no será lo mismo en zonas más favorecidas por la gran cantidad de sol como el NOA o Cuyo que en la Patagonia, por ejemplo.
• Conocer el tipo de construcción y sobre todo la aislación que presenta (alta, media o baja)

El análisis de todos estos factores va a permitir evaluar la inversión inicial y decidir qué sistema se adapta mejor.

La diferencia es aún más interesante tratándose de consumos a gran escala en comparación a la calefacción domiciliaria. Por ejemplo una empresa que consume $500.000 pesos de gas envasado al mes, va a dejar de depender de los fluidos de gas, planteando sistemas industriales de utilización continua basados en energía solar. Esto va a permitir que se ahorren grandes cantidades de fluido, generando un ahorro económico muy importante y con un periodo de retorno de la inversión muy interesante. 

El calentamiento de agua por sistema solar a gran escala permite por lo tanto calefaccionar edificios, hoteles y plantas industriales; por ejemplo, alimentando las calderas de un proceso productivo. De este modo las posibilidades de uso y ahorro crecen exponencialmente.

Asesoró: Lic. Pablo Greco: Director de la empresa Hissuma Solar.

FOTO: Paneles solares