ENSAMBLE 440 : música de cámara de alto nivel
Diversas expresiones artísticas se dan cita a toda hora del día y en particular en la zona del microcentro de
nuestra Ciudad de Buenos Aires. En días laborales, y entre los habituales trabajadores apurados que
desprendidos de antiguos portafolios llevan su vida en la memoria de un celular, conviven los
tradicionales vendedores públicos, el personal de tránsito, los moto – mandados y ocasionales artistas
circenses, de teatro y por supuesto músicos de diversas formaciones y variados estilos. El crecimiento de
las líneas de subterráneos permite que en pocas estaciones el pasajero disfrute de un cantautor de baladas,
de un cantante de rap, de un monólogo y hasta de una obra de teatro con varios personajes, siendo
espectador y parte del decorado al mismo tiempo.
Sin embargo, lo que ha crecido exponencial y particularmente en puntos de conexión, trasbordo y
combinaciones de líneas, es la presencia de músicos altamente calificados que interpretan instrumentos de
cuerdas tales como violines, violas, violoncellos y contrabajos, flautas traversas, guitarras, arpas,
percusión y otros; que gracias a la generosidad de algún local de andén que les provee corriente eléctrica
a 220 volts, conectan teclados y amplificadores para vivir un show en las mejores condiciones técnicas
posibles.
Asimismo, y en una invitación a la observación, podremos comprobar que son muchos los jóvenes que
transitan la ciudad munidos de instrumentos académicos, atriles plegables, carpetas con partituras en
soporte papel y ataviados con vestimenta de concierto.
La ciudad de Buenos Aires y sus artistas no se detiene y mucho menos en los fines de semana.
Afortunadamente, siempre aparecen perlas muy cultivadas que otorgan a la música, en general y en
particular; un altísimo vuelo artístico. Es el caso de ENSAMBLE 440, un grupo de jóvenes intérpretes
que vienen recorriendo los espacios tradicionales para la música de cámara. Bajo la dirección del Mtro.
Ignacio Mandrafina, un talentoso joven intérprete de violín, director concertador y arreglador; muchos
porteños, turistas y ocasionales visitantes se dieron cita el pasado domingo 8 de Diciembre a las 11 en el
Salón Dorado de la Casa de la Cultura, Av. de Mayo 575, donde hasta 1988 funcionó el Diario “La
Prensa”.
Vale recordar que fue en ese año y bajo la presidencia del Dr. Raúl Alfonsín que el diario pasó a
concentrar sus actividades en sus talleres de Puerto Madero, lo que propició la oportunidad del traspaso
del edificio a la ex Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires. Así quedaron anexados el Edificio
Municipal y la Casa de la Cultura a través del pasaje Ana Díaz dando lugar a un espacio público para
exhibición de exposiciones temporarias de arte.
El centro neurálgico de la ciudad, la existencia de sus edificios públicos como la Casa de Gobierno, el
Cabildo, la Catedral Metropolitana, El Banco Nación y la Legislatura Porteña, todos en derredor de la
histórica Plaza de Mayo, nos remite a la idea de un paseo atractivo a la luz de la mañana dominical
mientras revolotean miles de palomas y gorriones y algunos niños logran la cercanía a las aves a través de
migas de pan o maíz ofrecido por algún vendedor ocasional.
Pero desde hace varios años y con una profunda gestión en este 2024, la Dirección de Música de la
Ciudad, bajo la figura de su Director General, el compositor, productor artístico, docente y gestor cultural
Gustavo Mozzi, ha impulsado el Ciclo de Conciertos en el Salón Dorado.
De tal manera, el paseo en día domingo, ofrece una nueva alternativa a las 11 de la mañana en un edificio
de notable arquitectura basado en los cánones estilísticos de la Escuela de Bellas Artes de París.
ENSAMBLE 440 ofreció un concierto con exquisita intención “in crescendo”. Inició su presentación
abordando “Preludio” y “Gavotte” del compositor Reinhold Glière (1875 – 1956) soviético de origen
germano – polaco a cargo de Ignacio Mandrafina en Violín y Alan Benavidez en Contrabajo. Luego, de
Arcangelo Corelli (1653 – 1713) se interpretó la “Ciaccona” con Mandrafina y Joaquín Díaz en violines y
Nora Guzzetti en violoncello a modo de continuo para interpretar seguidamente, Cinco Piezas para dos
violines y piano de Dmitri Shostakóvich a cargo de Mandrafina y Nancy Guenufil en violines y Florencia
Claros en piano.
Esta primera parte del concierto, ya dio cuenta de la fineza, la formación calificada y el sentido
interpretativo de los artistas frente al silencio y la mirada expectante de los asistentes.
Luego, ENSAMBLE 440 creció en su cantidad de músicos para interpretar la delicada “Serenata de
Cuerdas” de Edward Elgar (1857 – 1934), el “Concierto de Brandenburgo No. 3 en sol mayor” – BWV
1048 de Johann Sebastian Bach (1685-1750) dedicado al Príncipe Christian Ludwig de Brandenburgo, y
el “Concerto alla rustica” en sol mayor, RV 151, de Antonio Vivaldi (1678 – 1741).
Fuera de programa y ante el prolongado aplauso del auditorio, ENSAMBLE 440, en vísperas de la
próxima Navidad interpretó “Stille Nacht, heilige Nacht” (Noche de paz), el célebre villancico austríaco
escrito en 1816 por el sacerdote Joseph Mohr y el organista Franz Xaver Gruber y la popular canción
navideña de estilo pop con “All I Want for Christmas Is You”, escrita por Mariah Carey y Walter
Afanasieff.
Cabe destacar que, en palabras del Mtro. Ignacio Mandrafina, el concierto abordó caracteres didácticos
dado que, ante cada nueva ejecución existió una referencia al compositor, su estilo interpretativo y las
características de la obra.
La proximidad entre los intérpretes y el público en el marco de la belleza del Salón Dorado de la Casa de
la Cultura permitió el encuentro y el saludo afectivo entre artistas y asistentes en general, los que
agradecieron de distintas formas el hermoso momento vivido.
La programación del Salón Dorado de la Casa de la Cultura en nuestra bella Ciudad de Buenos Aires,
puede consultarse permanentemente a través de las redes sociales y la oferta, siempre gratuita, ofrece la
presentación de artistas de reconocida trayectoria: coros, orquestas, intérpretes de música popular, tango,
música de cámara, ópera y agrupaciones de jóvenes estudiantes pertenecientes a Escuelas de Música y
Conservatorios de la Ciudad de Buenos Aires.
Hugo René Sanz
FOTO: Ensamble 440