Abandono y deterioro de un edificio singular
Es un edificio único en Buenos Aires y desde luego en el barrio de Retiro. Se trata del que es sede de Parques Nacionales, situado en la curva de Santa Fe que va hacia Florida, frente a la Plaza San Martín.
Decimos único por su arquitectura, y por el lugar donde está emplazado. Es un castillo construido a finales del siglo XIX, copia de un ala del castillo de Blois de Francia, según nos explicara hace tiempo un arquitecto del lugar. Y la manzana que lo contiene es de por sí singular, ya que tiene una forma triangular.
Se lo conoce como Palacio Haedo, ya que fue residencia de esa familia. Tuvo otros destinos posteriores, hasta que fue comprado por el Estado Nacional para sede de la Administración de Parques Nacionales.
Pero el caso es que hoy luce completamente abandonado, a pesar de su valor arquitectónico e histórico. Hace años, prácticamente una década que está rodeado de tubos, anunciando una reparación que nunca llega. En su fachada luce -es un decir- un cartel colocado el año pasado, anunciando las obras para su puesta en valor, que no se llevaron a cabo.
Parece lógico que el cambio de autoridades haya dejado sin efecto el anuncio, que tampoco parecía que fuera a concretarse. Entonces actualmente tenemos una dependencia oficial, en un edificio excepcional absolutamente abandonado y en pésimas condiciones.
Esperamos que alguna novedad se produzca al respecto, de modo que el palacio Haedo, pequeño y hermoso castillo de Retiro, recupere su esplendor. Y pueda continuar sus funciones brandando un margen diferente de comodidad y seguridad a quienes allí trabajan.