La estación Retiro de la línea C del subte puesta en valor
Los 190 mil pasajeros diarios de la línea C de subte que une Retiro con Constitución están de parabienes. Desde el pasado mes de febrero –después de haberse suspendido el servicio por dos semanas- la línea cuenta con un nuevo sistema de señalización. Se reemplazó el antiguo sistema ATS (Automatic Train Stop), que es mecánico y estaba desde 1934, por uno denominado CBTC (Communications Based Train Control), que es digital. Esos dispositivos son los que indican si el tramo siguiente de vía se encuentra vacío. El CBTC funciona con una comunicación continua entre el tren y la vía y también entre las formaciones, que transmiten en tiempo real su posición y velocidad. Esto permite que siempre quede una distancia entre los trenes de al menos 30 metros sin riesgo de impacto, lo cual proporciona mayor seguridad. Gracias a este nuevo sistema, mejoró la frecuencia del servicio y se redujeron notablemente las demoras e interrupciones.
El flamante sistema de señales está compuesto por tres monitores de computadora y un software de control de tráfico y está operado por una sola persona mientras que el sistema anterior –que se manejaba en forma manual- demandaba nueve empleados repartidos en las estaciones cabeceras y otros dos en la estación Moreno. Ese personal sobrante fue reubicado en otras funciones.
A partir de esta innovación la línea C está monitoreada desde el Puesto Central de Operaciones (PCO), desarrollado por Metrovías y ubicado debajo de la estación Moreno. Este dispositivo posibilita desde manejar las señales y detener los trenes si así fuese necesario hasta transmitirles por radio indicaciones u órdenes a sus conductores. Desde allí también se supervisan todas las cámaras de seguridad. También en este caso, mediante el PCO, se logra reducir el tiempo de respuesta ante cualquier eventualidad.
Las refacciones realizadas también incluyeron la ampliación de la potencia eléctrica de la línea C, cuya flota posee aire acondicionado en su totalidad.
Durante el período en que estuvo suspendido el servicio, se aprovechó para efectuar algunas obras de puesta en valor de la estación Retiro de la línea C, si bien todavía restan varios meses para finalizarlas.
En este sentido se colocaron pisos nuevos, tanto en el andén como en el hall central, que incluyen la senda para no videntes. Se renovó la cartelería: a través de la nueva señalización pudo implementarse el sistema “Próximo tren”, que indica el tiempo restante para la llegada de la siguiente formación al andén. Se instaló un ascensor para discapacitados y falta construir otro, según señaló un empleado auxiliar de la línea. Además, se colocaron lámparas LED y se pulieron las paredes.
En cuanto a los locales comerciales, la mayoría están cerrados. Sólo están abiertos el puesto de diarios y un negocio de lotería. El proyecto es renovar los frentes de todos los locales. Quedan pendientes varias remodelaciones: la pintura del cielorraso, la instalación de una escalera mecánica hacia la calle, la ampliación de la escalera que da salida a la avenida Ramos Mejía, lo cual favorecerá una circulación más fluida.
La obra que seguramente demandará más tiempo será la construcción de un túnel que unirá la línea C con la estación Retiro del Ferrocarril Belgrano, lo cual permitirá que los usuarios no deban salir a la superficie para realizar tal conexión.
Observamos que la boletería está muy deteriorada. La idea es mejorar su frente. Hay una salida cerrada por refacciones. Debe destacarse la presencia policial tanto en el andén como en las cercanías de los molinetes. Por otro lado, las terminales de recarga de la tarjeta SUBE no funcionan, directamente están apagadas.
Laura Brosio
FOTO de arriba:
La estación Retiro del subte C ha sido puesta en valor recientemente